lunes, 7 de febrero de 2022

Esperando el arcoíris

Con mi último libro, "Catorce lunas menguantes" (MAR Editor), ilustrado por la genial Raquel Ordóñez Lanza y galardonado con el II Premio Liliput de Narrativa Joven, pretendía sensibilizar especialmente a los más jóvenes sobre la importancia de cuidar nuestra Naturaleza para, con ello, cuidarnos todos.
En él se abordan a través del cuento cuestiones medioambientales tan actuales como el calentamiento global, ese derretimiento de los polos que conlleva, tanto vertido de plásticos al mar, aquella contaminación acústica, lumínica o incluso espacial... insistiendo en que no son problemas menores, ni distantes, ni de otros, sino de toda la Humanidad
En este invierno de nuestra provincia en el que llueve tan poco -casi un 40% menos que la media anual-, con los embalses tan bajos y el mes de diciembre más cálido desde que existen registros de temperatura, tal objetivo adquiere mayor valor si cabe. De ahí la importancia de insistir en esa Educación verde que ya no es que pretenda solo un mundo mejor para nuestros hijos, sino mejores hijos para nuestro mundo. Aunque, eso sí, ¡nos queda aún mucho por mejorar!
Pese a todo, prefiero ser positivo... Y es que, como aprendiera de la etnia Kikuyu, siempre que hay tormenta, después habrá arcoíris.